Fue una velada perfecta, producto de una combinación de factores como fue tener una banda de usted y tenga bien aceitada, un director de orquesta y tres cantantes salseros todos de gran respeto y larga trayectoria en sus respectivas carreras y, además, al mejor público del mundo bailando y cantando.
El orden de factores no fue importante. Cada cual tuvo su tiempo de protagonismo.
Pero, fue sin duda la figura de Willie Rosario, el director de orquesta, el músico, el timbalero, el que durante la primera semana de mayo cumplirá 100 años de vida, fue el eje o punta de lanza de todo el espectáculo musical del magno concierto titulado “Los 100 años de Willie Rosario” que cobró vida anoche en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot ante un lleno total.
El espectáculo tuvo un libreto, una línea de seguimiento, que convirtió la velada musical en un recorrer en cierta medida de la carrera de la orquesta de Rosario desde que el músico coameño “se afincó” en la isla, desde inicios de la década de 1970 cuando pegó en demasía los números “De Barrio Obrero a la 15″ y “La cuesta de la fama”, que el salsero boricua los hizo sus favoritos.
Vídeos en la pantalla del plató, fotos, muchas de ellas históricas, recortes de revistas y periódicos de las décadas de 1950, 1960 y 1970, cuando Rosario comenzó su orquesta hace 64 años en Nueva York, junto a la narración tipo crónica del periodista y productor Hermes Ayala, quien “jugó y vaciló” con los títulos temáticos de las canciones de todos los tiempos de Rosario, junto a la presentación del jovencito Gerardo Gabriel, tocando los timbales, fue lo que marcó el inicio del concierto.
El concierto se dividió en dos partes. Y la banda que deleita, esa que es la favorita del público salsero para bailar, no defraudó.
1 / 12 | Willie Rosario celebró sus 100 años con sendo concierto. El espectáculo tuvo un libreto, una línea de seguimiento, que convirtió la velada musical en un recorrer en cierta medida de la carrera de la orquesta de Willie Rosario. – Stephanie Rojas Rodríguez
Primeros clásicos
Abrió la tanda el emblemático cantante salsero Chamaco Rivera, quien deleitó al público con su icónica canción “De Barrio Obrero a la 15″, que de inmediato puso a la gente a bailar en cada espacio o pasillo libre del Coliseo.
Bailar y cantar, sonear, hacer coro, esa fue la orden del día por parte de los miles de salseros que se dieron cita a celebrar con el doctor Willie Rosario, conocido como “Mr. Afinque”.
Willie acompañó a Chamaco en el tema e hizo lo mismo con las siguientes canciones “Ojalá te vaya bonito”, grabada por Junior Toledo, “Anuncio clasificado”, grabada por Primi Cruz, y que fueron interpretadas por dos de los nuevos cantantes de la orquesta de Rosario, José de Jesús “Papachú” y José “Machete” Díaz, que se echaron en un bolsillo al público.
“Gracias por estar aquí con nosotros esta noche. Eso significa mucho”, le dijo Rosario al público.
Merecido descanso
Tras estos tres temas, fue un acierto el que subiera a tarima el director de orquesta, percusionista, timbalero y cantante, Manolito Rodríguez, quien siguió el mando de la orquesta, lo que le permitió al maestro Rosario tomarse un descanso, previo a la segunda parte del concierto, que fue candela con la participación de Tony Vega y Gilberto Santa Rosa.
El concierto siguió con los temas “Échame la culpa a mí”, grabado por Junior Toledo, y que cantó Erick Robles y de igual forma el tema “Juventud del presente”, grabado por Junior Toledo como Juventud siglo XX, y que cantó Manolito.
Hay que destacar que, ante la salida de Rosario, la orquesta con la presencia de Manolito siguió con la misma intensidad y sabor y lo mismo sobre la actuación de los nuevos cantantes de Rosario, De Jesús, Díaz y Robles.
El público “les compró” su vuelta. Cantaron muy bien lo temas en su agenda, con buen afinque y fue importante que hicieran la misma línea de soneos en esos temas que hace décadas grabó Rosario y su orquesta. Igual se destacó Manolito. El público bailó y cantó con ellos. El aplauso fue real para todos.
Tan pronto tengan la oportunidad de grabar temas propios con Rosario, este trío de jóvenes cantantes va a dar de qué hablar.
Sonido de trompeta
El maestro y director de orquesta, el trompetista Humberto Ramírez, un querendón del público puertorriqueño, hizo su entrada en tarima. A través de varios vídeos, Ramírez fue el enlace para ir mostrando parte de la trayectoria musical e histórica del maestro Rosario.
Hay que recordar que Ramírez perteneció a la “banda que deleita”, que dirigió Rosario por espacio de cuatro años (1984 a 1988) y que, además de participar como arreglista del grupo, le produjo tres discos de larga duración a Rosario.
Ramírez interpretó con su trompeta y acompañado por la banda el tema instrumental de su autoría “Mr. Afinque”, dedicado a Rosario.
Los temas “Cha-cha-ri-cha”, grabado por Guillo Rivera, que cantó José de Jesús, “Preparen candela”, grabado por Primi Cruz, interpretado por Manolito Rodríguez, en el cual se dio un mano a mano en el timbal por parte de Rodríguez y el jovencito Gerardo Gabriel, que fue del deleite del público, así como el tema “El callejero”, grabado por Pupy Cantor Torres. y que interpretó Erick Robles, cerraron la primera parte del concierto.
La orquesta de Rosario estuvo compuesta por los trompetistas Fernando Marcano, Efrén Rodríguez, Luis Ramos y Carlos Martínez, en el barítono Alberto Linare, en el bajo Roberto Pérez, en el piano Richard Trinidad, en las congas Juan Padilla, en el bongó Rafael Corchado y en el güiro Luis Soto.
Plato fuerte
Y entonces llegó el turno del plato fuerte del concierto. Willie, Tony y Gilbertito, salieron a la tarima. Rosario se presentó a escena con gabán color rosita y pantalón blanco.
Se esperaba que tanto Vega como Santa Rosa subieran con el mismo atuendo. Pero, qué va. Los dos, “como nenes chiquitos” se pusieron de acuerdo tras bastidores y salieron impecables con gabán y pantalón azul.
“El desquite llegó”, dijo Vega, para pasar a contar la anécdota sobre la vez que Rosario hizo que el grupo se vistiera con gabán color rosita y pantalón blanco, y fueron objeto de burlas en la calle.
Ciertamente que tanto Vega como Gilbertito se gozaron su participación anoche junto al maestro Rosario y recordaron varias travesuras y anécdotas de cuando le dupla se afincó con Willie, para convertirse en la década del 1980 en una de las orquestas más queridas y seguidas en Puerto Rico y a nivel internacional.
Y ambos no dejaron pasar la oportunidad para “vellonear” a “Mr. Afinque”, algo que jamás se hubieran atrevido a hacer en tarima cuando Rosario era “El Boss”, pero anoche, fue otro el cuento, como dijo Gilbertito, ya que estaban celebrando “los primeros 100 años de vida de Willie Rosario”.
Bueno, y ¿qué hizo distinto Willie Rosario en el timbal a lo que ha venido haciendo desde que mudó su orquesta a Puerto Rico? Pues sepa que nada. Siguió con su cascareo estable en su timbal, al pulso, tranquilito, sin apenas dar un “corte de pastelillo”, puro látigo.
Pero, mientras Tony y Gilbertito seguían en “su chercha” y tratando de vacilar al maestro, el Doctor Rosario, una vez empezaba el número, bajaba la cabeza cuando ellos miraban para atrás, como queriendo pedir un descanso en los soneos. Así, de esta forma “los castigaba y se desquitaba” de las travesuras de ambos, y los llevó al palo en toda la noche.
La secuencia de temas que cantaron Vega y Santa Rosa puso a gozar al público.
“Babarabatiri” (Santa Rosa), “Amigo el payaso” (Vega), “Obra sellada” (Santa Rosa), “A toda Cuba le gusta” (Vega), “La mitad” (Santa Rosa), “Arrepentidos pecadores” (Vega), “Me tendrán que aceptar” (Santa Rosa), “Busca el ritmo” (Vega), “Chango ta bení” (Santa Rosa), “El flamboyán” (Vega), “El timbal de Carlitos” (Vega) y los temas “Gracias mundo”, “Botaron la pelota” y “Lluvia”, que cerraron el concierto.